Caos y muerte. Las fuertes lluvias que se abaten sobre Rio de Janeiro desde el lunes pasado han dejado al menos 102 muertos en este estado brasileño, según el último balance oficial dado a conocer por las autoridades del cuerpo de bomberos. El balance anterior, divulgado en la noche del martes, llegaba a 98 víctimas fatales.
Según los bomberos, los muertos en la ciudad de Rio alcanzaron 37 en las últimas horas, pero el mayor número de víctimas mortales se registró en la ciudad de Niteroi, al otro lado de la bahía de Rio, con 53 fallecidos.
La mayoría de las muertes se verificaron tras aludes de lodo en las favelas, los barrios más pobres establecidas en las laderas de las colinas. Solo en Morro dos Prazeres, cerca del centro de la capital, murieron 14 personas sepultadas por un deslizamiento de tierra.
Rio de Janeiro registra desde el lunes pasado el peor temporal de los últimos 44 años, según las autoridades, que provocó el caos en la ciudad de 11 millones de habitantes.
El alcalde de Rio, Eduardo Paes, resolvió mantener cerradas las escuelas públicas por segundo día consecutivo y en la madrugada de hoy pidió a las escuelas privadas que hicieran lo mismo, para disminuir el nivel de circulación en una ciudad que desde el martes parece desierta en sus zonas administrativas.