El juez federal Norberto Oyarbide salió al cruce de las críticas recibidas por sobreseer a la presidenta
Cristina Kirchner y a su esposo, Néstor Kirchner, en una causa por presunto enriquecimiento ilícito, y desafió: «tengo el cuero muy curtido, pídanme los juicios políticos que quieran».
Oyarbide reiteró que su fallo se basó en el informe del cuerpo de peritos de la Corte Suprema en el que, según el magistrado, «dijeron que el crecimiento económico patrimonial era justificado» y rechazó así las críticas que le dedicó la oposición.
«Tengo el cuero muy curtido, de mí han dicho de todo; pídanme todos los juicios políticos que quieran», replicó el magistrado en declaraciones radiales, y sostuvo que las críticas formuladas en su contra tienen «un trasfondo político».
El juez admitió que no desconocía que su fallo despertaría «opiniones a favor y en contra» pero afirmó que «hay decisiones que no calzan justo a las apetencias políticas» de turno. «Yo lo siento muchísimo», manifestó Oyarbide, quien concluyó diciendo que no está para ganarse «el cariño de la población ni mucho menos».