Oyarbide insiste en que puede citar a Macri y Montenegro en la causa sobre espionaje

Oyarbide insiste en que puede citar a Macri y Montenegro en la causa sobre espionaje

El juez federal Norberto Oyarbide confirmó hoy que no descarta «la posibilidad de una convocatoria» a declarar al jefe de gobierno porteño, Mauricio Macri, y «hasta el ministro de Seguridad», Guillermo Montenegro, en la causa de espionaje telefónico desde esa administración, en la que están imputados el ex jefe de la Policía Metropolitana, Jorge «Fino» Palacios, y el ex policía federal Ciro James.

«Lo que se ha hecho (en materia de espionaje) es verdaderamente increíble», dijo el magistrado a los periodistas que lo aguardaban en las puertas de su casa en el barrio porteño de Recoleta y puntualizó que se grabaron ilegalmente algunas «conversaciones de un grado de delicadeza extraordinario».

Ya había anticipado Oyarbide al diario La Nación la posible citación en febrero para Macri en la causa por las escuchas y lo argumentó con que «la Cámara me insta a proseguir y yo interpreto que significa establecer posibles redes de complicidades».

«Todo indica un avance hacia arriba. Esto podría abarcar una posible convocatoria del señor Macri y otras personalidades que lo acompañan en su gestión», por lo que consideró «posible» una citación del jefe de Gobierno en febrero próximo.

Existen en la causa, dijo, «conversaciones ultraprivadas, extremadamente delicadas» vinculadas al cuñado de Macri, Néstor Leonardo.

En tanto, está pendiente de resolución un pedido de excarcelación elevado por Palacios, procesado por escuchas telefónicas al miembro de Familiares y Amigos de Víctimas de la AMIA, Sergio Burstein.

El abogado de Palacios, Diego Richards, presentó ante la Cámara Federal un «recurso de casación» contra la decisión de ese tribunal del 22 de diciembre pasado, que confirmó el procesamiento con prisión preventiva de Palacios. En caso de tener curso favorable, la Cámara de Casación deberá resolver este tema.

El ex comisario está detenido en la cárcel de Marcos Paz desde el 17 de noviembre pasado. El juez federal Norberto Oyarbide le imputó «asociación ilícita y defraudación al Estado», junto con otros acusados, entre ellos el ex policía federal y ex empleado de la comuna porteña Ciro James.

Sobre Palacios pesan, además, cargos de supuesta «falsificación de documento público e intervención indebida de comunicaciones» en el caso de Burstein.

En caso de seguir su curso el pedido de Palacios, Casación podría resolverlo antes del fin de la feria judicial de enero.

En el caso de las escuchas también están procesados James, los policías de Misiones Diego Guarda, a cargo de la sección Escuchas de la Dirección de Investigaciones de esa fuerza; Raúl Rojas, jefe de la División Homicidios, y Rubén Quintana, director de Investigaciones Complejas, y los secretarios judiciales Mónica González, Augusto Busse, Lidia Kruchowski y Fernando Javier Castelli.

Además de Burstein también fueron víctimas del espionaje el cuñado de Mauricio Macri, Néstor Leonardo; el empresario Carlos Avila y su yerno, dos gerentes de la cadena de supermercados Coto, la cuñada del empresario Juan Navarro, el perito Francisco Castex y el anticuario Hugo Breitman.

La maniobra se realizaba a través de información que James les pasaba a los policías de Misiones para intervenir los teléfonos, y estos lo solicitaban a la Justicia de la provincia, desde donde se hacía el pedido formal a la SIDE, de la cual el ex empleado del Gobierno porteño retiraba las desgrabaciones.

El proceso se realizaba en una causa por el homicidio de un contador en 2005, con el que los espiados no tenían ninguna vinculación.