El juez en lo civil Roberto Parrilli ordenó que se retiren los carteles publicitarios «que se encuentren en infracción», en el barrio porteño de Núñez, informaron hoy fuentes judiciales.
La medida establece que se deberán retirar «todos aquellos carteles o anuncios de publicidad que se encuentren en infracción» y que se hallan «emplazados en la zona del predio lindero a las vías del ferrocarril Belgrano Norte», entre las avenidas Lugones y Cantilo, de la ciudad de Buenos Aires.
La medida deberá ser cumplida por el gobierno de la Ciudad Autónoma de Buenos Aires (GCABA), la empresa Ferrovías S.A y PC Publicidad S.A., en una causa promovida por la Asociación Protección Consumidores del Mercado Común del Sur (Proconsumer). El magistrado dispuso además que «en el plazo de diez días corridos de contestado el pedido de informe que se cursará … procedan a retirar todos aquéllos carteles o anuncios de publicidad que se encuentren en infracción».
El magistrado también solicitó para llevar adelante la medida, un informe detallado de la ubicación de los carteles a la Dirección General de Ordenamiento de Espacio Público (del GCABA) con la información acerca de cuáles de ellos a la fecha cumplimentan todos los recaudos.
El juez recordó que, en la demanda, se señala que «dichos carteles son contaminantes y perjudiciales para la salud de la población, amen que su instalación ilegal y permanencia viole otras normas jurídicas nacionales y del Gobierno de la Ciudad» y que se ignora si esas publicidades cuentan «con algún tipo de autorización gubernamental para su colocación».
El juez sostuvo que «sin soslayar la problemática paisajística, el problema central es de seguridad vial», al señalar que «no es una cuestión de estética urbana sino de preservar la vida, derecho humano básico lo cual exige de todos los poderes del Estado Nacional, provinciales y municipales conductas activas y de prevención».
El magistrado afirmó que «más allá de lo expresado es un hecho evidente que los carteles publicitarios si se emplazan sobre estas vías es para que quienes transitan por ellas los observen, les llame la atención. De donde se sigue, sin necesidad de extremar mucho el razonamiento, que si se atiende al cartel, no se atiende al tránsito».