El día en que el futbolista de River Diego Buonanotte fue dado de alta, tras su internación por el accidente que sufrió con su auto en la localidad de Arribeños, en el que murieron los tres amigos que viajaban con él, se conocieron los resultados de algunos peritajes: tenía 0,40 g de alcohol en orina y cero gramos en sangre.
El fiscal de la causa, Carlos Colimedaglia, dijo que «los peritos serán quienes determinen si esos valores
influyen o no a la hora de conducir. A juzgar por el valor permitido para manejar, que es de 0,50 g en sangre, no tendría problemas. Pero eso lo determinarán especialistas de acuerdo con muchas variables».
El lunes próximo, según ordenó Colimedaglia, se le hará un estudio de ADN de la sangre del futbolista para cotejar que coincida con la muestra tomada después del accidente. El análisis de sangre, según el fiscal, fue extraído seis horas después del hecho (los expertos sostienen que el alcohol en sangre se volatiliza dos horas después de la ingestión).
Según el vicepresidente primero de River, Diego Turnes, ya no hay interrogantes. «Diego [por Buonanotte] no superó el límite permitido de alcohol en sangre y, por tanto, es un tema terminado», dijo. En tanto, el abogado de Buonanotte, Darío De Ciervo, ordenó también un registro meteorológico de la hora precisa en que se produjo el accidente, que se sumará a los peritajes realizados sobre el estado de la ruta. Quedan pendientes los informes de los estudios de ingeniería mecánica en el automóvil que conducía.