Prefectura busca a Erica Soriano en inmediaciones de la reserva ecológica y puerto de Buenos Aires

La Prefectura Naval buscaba este mediodía a Erica Soriano, la joven embarazada que permanece desaparecida desde el 21 de agosto pasado, en el río de la Plata desde Puerto Madero hasta las inmediaciones de la Reserva Ecológica porteña.

Allegados a las investigaciones indicaron que el procedimiento continuará durante todo el día, posiblemente hasta el puerto de Olivos, en la jornada durante la cual se cumplen dos meses de la última vez que fue vista la mujer.

El operativo, dispuesto por el fiscal de Lomas de Zamora Gerardo Loureiro, era realizado por buzos de salvamento asistidos por gomones, lanchas y grupos de infantería que rastrillaban las orillas.

Soriano, de 30 años, salió de su casa del partido bonaerense de Lanús con destino a Villa Adelina, en San Isidro, en la mañana del 21 de agosto pasado, con el propósito de ir a almorzar con su madre y su hija de 12 años, que había quedado al cuidado de la abuela.

La mujer nunca llegó a la casa de su mamá y desde entonces Daniel Lagostena, pareja de la joven, se convirtió en sospechoso para la familia de Erica.

Lagostena, de 50 años, explicó a la policía que su pareja salió enojada de la casa que compartían tras discutir fuertemente.

Días después la policía buscó a la joven en un campo de Saladillo donde la pareja solía ir a pasar los fines de semana largos, aunque sin éxito. Posteriormente los investigadores allanaron la casa de Lagostena, en Coronel Santiago al 1200, de Lanús, y hallaron “huesos humanos” que serían de los que usan los estudiantes de medicina, explicaron los informantes.

Al no tener ninguna novedad sobre el paradero de la joven, a fines de setiembre el Ministerio de Justicia y Seguridad bonaerense, a cargo de Ricardo Casal, ofreció una recompensa de entre 20 mil y 70 mil pesos para quienes aporten datos fehacientes que permitan dar con el paradero de Erica.

El 6 de octubre pasado los investigadores allanaron la casa de los padres de Daniel Lagostena, medida dispuesta por el fiscal Loureiro a pedido del abogado Ariel Ursino, que representa a la familia de Erica.

Personal de la Policía Científica, junto a geólogos y antropólogos, ingresaron a la casa del padre de Lagostena, en Sayos al 1000, y realizaron una infructuosa requisa que incluyó pruebas de ‘luminol’ para detectar rastros de sangre, como también usaron perros adiestrados en busca de rastros y personas.