OKLO, la compañía con sede en Santa Clara, California, busca revolucionar el mundo de la energía. Esta empresa joven, con menos de 10 años de vida, se centra en la creación de generadores de fisión naturales y combustible reciclado. Con esa misión salió a bolsa y ya recibió el apoyo de un peso pesado de la tecnología.
Es que el mismísimo Sam Altman, CEO de OpenAI y uno de los tres popes del mundo actual de la tecnología junto al inoxidable Bill Gates y el obsesivo Elon Musk, apoyó públicamente la salida a bolsa de la compañía. Este apoyo es fundamental teniendo en cuenta que las tecnológicas están urgidas de energía para apuntalar sus proyectos de Inteligencia Artificial.
“Felicitaciones a OKLO por salir a bolsa”, comienza el posteo de Altman. Y lo completa diciendo que “la energía es una de las cosas más importantes en las que trabajar y estoy entusiasmado de ayudar a respaldar esa misión. ¡adelante!”
La comunión entre la energía y la tecnología queda de manifiesto en la página web de la compañía californiana donde se destaca que todo su personal ha trabajado anteriormente en compañías como Apple, SpaceX, Google, Tesla y Netflix. Solo faltaba Microsoft para que canten Bingo.
De hecho en el posteo Altman saluda especialmente a Jacob De Witte, CEO de OKLO, y Caroline Cochran, Directora de Operaciones. Dos personas que trabajaron con él durante una década.
Pasado, presente y futuro de OKLO
OKLO está desarrollando reactores de fisión de próxima generación para producir energía limpia, abundante y accesible a escala mundial. Actualmente tiene 3 proyectos en carpeta y necesita financiación para llevarlos adelante, por esa razón entró a la bolsa.
Los proyectos aún necesitan un par de años para comenzar a trabajar. Se espera que estén activos en 2027. Una vez activos, funcionaran con residuos reciclados y tendrán una vida útil superior a los 10 años.
OKLO hizo historia con el primer permiso de uso de un reactor avanzado, obteniendo acceso a combustible reciclado y presentando la primera solicitud de licencia combinada para un reactor avanzado.
La firma es muy joven, recién en 2016 comenzó a tramitar los permisos con lo órganos regulatorios, algunos los recibió en 2019, lo que le permitió avanzar con las pruebas, otros los sigue esperando y espera conseguirlos para 2027.
Aurora, la nave insignia
Aurora, que hoy en día se encuentra en proceso de reglamentación, es el proyecto insignia de OKLO.
Está diseñado para funcionar y autorregularse principalmente mediante fenómenos físicos naturales y, en consecuencia, tiene muy pocas partes móviles, lo que aumenta la seguridad. También está previsto que pueda funcionar durante decenios sin recarga de combustible, utilizando uranio poco enriquecido de alta concentración.
“La reacción de fisión puede utilizarse de muchas maneras: a gran y a pequeña escala, con diferentes combustibles o empleando distintos métodos de refrigeración, y permite muchos tipos distintos de modelos de negocio, interacción con la comunidad y propiedad”, sostiene Caroline Cochran, Directora de Operaciones de OKLO.
(Nota realizada con información de Organización Internacional de Energía Atómica)