Otra vez la violencia y otra vez un colectivero como víctima. Un joven chofer sufrió esta madrugada un profundo corte en una mano al ser atacado por dos delincuentes, quienes lo asaltaron e intentaron amputarle un dedo cuando estaba a punto de terminar su recorrido, en la localidad bonaerense de Monte Grande.
El episodio -que se suma a otros hechos de similares características ocurridos en los últimos días- derivó en un paro de actividades dispuesto por los compañeros del chofer asaltado, que se extendió durante varias horas, hasta que finalmente a las 7 de la mañana levantaron la medida de fuerza.
Los delincuentes escaparon con algo de dinero y las zapatillas del chofer, quien a su vez debió ser internado en un hospital de la zona, con lesiones en un tendón de la mano derecha, aunque
fuera de peligro, según se informó.
La víctima de este nuevo episodio fue identificada por los investigadores policiales como Angelo Zelarrayán, de 24 años, quien fue atacado alrededor de la 1.30 de la madrugada, cuando
conducía el interno 4 de la línea 501 y estaba a punto de llegar a la terminal.
En momentos en que circulaba sin pasajeros, el chofer fue abordado por dos delincuentes armados, quienes enseguida lo amenazaron con fines de robo, según se indicó. Al resistirse al robo, los delincuentes le quisieron amputar un dedo con un cuchillo, pero no lo lograron, aunque sí le causaron una herida en un tendón.
