Aunque cautos, los familiares de Pilar Chávez son optimistas. La chica de 19 años que esperaba con urgencia un trasplante hepático, se recuperaba hoy tras la intervención y los médicos ya le retiraron el respirador artificial, según adelantaron esta mañana sus propios familiares.
La joven se encuentra internada en el Hospital Italiano de esta capital, donde ayer fue sometida a un re-trasplante de hígado para intentar salvarle la vida. De esta forma, los allegados de Pilar destacaron la «evolución favorable» que experimentó su estado de salud tras el segundo trasplante de hígado que recibió en menos de una semana.
No obstante, pese a los primeros signos favorables luego de la operación, los familiares y amigos prefirieron ser cautos, ya que -como recomiendan los médicos- hay que esperar unas 48 horas para confirmar el éxito del nuevo trasplante.
La joven padecía glucogenosis, una enfermedad metabólica de nacimiento que hizo que con el paso del tiempo necesitara atención médica cada vez con más frecuencia. En 2007 Pilar entró en lista de espera para un trasplante de hígado, algo que sucedió el sábado pasado. Ante el rechazo que experimentó el organismo, fue necesario volver a hacer un trasplante, lo cual se concretó ayer.