El fiscal contravencional porteño Martín López Zabaleta se quejó hoy porque la Policía Federal no acató su disposición para desalojar a trabajadores estatales bonaerenses que cortan una calle en el centro, e interpretó que esa negativa se debió a que la fuerza de seguridad recibió «una orden de su mando directo».
El funcionario judicial advirtió que «la fuerza de seguridad tiene la obligación, frente a una contravención en este caso flagrante, o sea que se está cometiendo en el momento y frente a su cara, de hacer lo mismo para hacer que la contravención no se siga cometiendo».
«Interpreto que si hacen omiso a una orden judicial, es porque tendrán unan orden administrativa, jerárquica, de su mando directo», manifestó López Zabaleta y agregó que la Policía Federal «depende de la administración pública central».
En declaraciones a radio Continental, dijo que ayer le comunicó la orden de desalojo al personal policial «en reiteradas ocasiones por vía telefónica» y luego envió un oficio para que fuera liberada la avenida Callao al 200, donde empleados nucleados en ATE cortaron el tránsito e instalaron varias carpas que hoy se mantenían, por demandas salariales.
«El personal policial me dijo que seguía con la negociaciones para evitar que eso llegue a mayores, y posteriormente me dijeron que no podían cumplir con la orden porque en un momento reciben una orden superior y no pueden avanzar», expresó.
El fiscal aseguró que los manifestantes «no permitían pasar a las ambulancias» y «durante toda la noche han estado molestando a los vecinos de la zona», por lo que su actitud «no se adecúa a lo que serían las normas de convivencia».