En todos lados hay descuidistas

Cuando el joven funcionario y su equipo desembarcaron en el Gobierno de la Provincia de Buenos Aires pensaron que iban a establecerse por varios años en esos despachos. Tan propio los sintieron que cuando repentinamente Daniel Scioli les pidió la renuncia, apenas dos meses después de haberlos designado, algunos confundieron el patrimonio público con el propio. Tal es el caso que un joven subsecretario se fue para no volver llevándose consigo la notebook y varios cuadros que pertenecían a la oficina. Luego de dos meses de pedidos, reclamos y hasta notificaciones formales la devolvió aduciendo que la había confundido con la computadora propia, según comentan. La sorpresa fue cuando  la notebook regresó a la Subsecretaría pero sin la valija correspondiente.