El Gobierno argentino ponderó el interés de los jueces de la Corte de Apelaciones de Nueva York, en los argumentos esgrimidos por los tenedores que ingresaron al canje y por el Banco de Nueva York (terceros afectados) favorable a la posición argentina y confirmó que sigue vigente el pedido «en banc» para que el caso sea revisado por la totalidad de los jueces del tribunal.