Docentes y padres de un jardín de infantes del barrio porteño de Bajo Flores reclamaban hoy, frente al establecimiento, que el gobierno disponga de combis tras el robo que sufrieron el miércoles pasado tres maestras de esa escuela, cuando fueron violentamente golpeadas por un grupo de jóvenes.
Con carteles en los que pedían combis y denunciaban robos y falta de seguridad en la zona, personal de la escuela cortaba este mediodía la intesección de las Avenidas Cobo y Curapaligüe.
Los docentes explicaron que mantuvieron reuniones con funcionarios del gobierno porteño que les sugirieron que hablaran con la policía ya que el ingreso de combis podría lesionar el vínculo con la comunidad.
Una docente aseguró que los padres manifestaron que «no sienten que la combi aleje a los maestros de la comunidad».
En tanto, una madre, que prefirió no dar su nombre, dijo a Télam que el pedido de seguridad es «para todas las familias del barrio, porque esta zona es muy insegura, ni siquiera las callestienen nombre y pedimos que la policía ingrese al lugar».