Después del intenso trabajo, todo fue algarabía. El milagroso y titánico rescate de los 33 mineros atrapados a casi 700 metros de profundidad, en la mina San José, llegó a su fin con el mayor de los éxitos e incluso antes de lo esperado.
Todos los mineros están en buen estado de salud y los rescatistas que habían bajado a buscarlos también emergieron a la superficie, desatando la alegría en todo el país, pero también en gran parte del mundo, que vio admirado por TV las imágenes de la hazaña.
El presidente Sebastián Piñera estuvo al frente del operativo todo el tiempo, abrazando y dialogando con cada uno de los mineros. Y al salir el último de los mineros, el jefe de turno, Luis Urzúa, cantó junto con él y con los demás integrantes del equipo las estrofas de su himno nacional.
Sobre la noche de ayer, salió el último de los rescatistas, el mismo que había ingresado primero a buscar a los mineros, y que ya es considerado un héroe: Manuel González.
Los seis socorristas que descendieron a 622 metros de profundidad dejaron para el recuerdo la imagen de un cartel en el fondo de la mina: «Misión cumplida Chile».
Ya cuando salió a la superficie, González le dijo al presidente Piñera: «Lo encargado está listo». El Presidente le respondió: «Don Manolo, usted fue el último. ¿Cuál fue su último pensamiento?». Y Manuel le respondió: «Que ojalá nunca más pase esto. Ojalá nos sirva de experiencia, que las cosas en la minería chilena sean diferentes».