La Presidenta lo echó, pero la polémica parece muy lejos de aquitarse. Todo lo contrario. Esta madrugada, cuando salía de la sede del Banco Central, el ahora desplazado titular de esa entidad, Martín Redrado, afirmó que no renunció a su cargo ni renunciará. Al mismo tiempo, se mostró «muy conforme» con su tarea al frente de la entidad.
«No renuncié ni renunciaré», dijo Redrado luego de una extensa jornada en la cual la presidenta Cristina Kirchner lo destituyó por un decreto de Necesidad y Urgencia, firmado por todos los ministros. Poco después de esas declaraciones, cuando ingresaba a su casa del barrio porteño de Belgrano, Redrado volvió a hablar brevemente con la prensa y sostuvo que está «muy conforme con todos los logros que hemos tenido en nuestra gestión».
«El Banco Central va a seguir garantizando la estabilidad financiera y cambiaria», agregó Redrado. Horas después de que se conocieran los términos del decreto firmado por la Presidenta y sus ministros, Redrado resolvió dejar el ejercicio del cargo, pero sin renunciar y apelando ante la Justicia.
En fuentes cercanas al funcionario aseguraron que Redrado se alejará del cargo en cumplimiento con el decreto firmado ayer por la Presidenta, en el que se disponía su separación. Sin embargo, Redrado apelaría hoy mismo ante la Justicia esa decisión mediante la presentación de un recurso de amparo.