El ministro del Interior, Florencio Randazzo, consideró hoy que el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, «tiene que hacerse cargo de los errores» y «no desviar la atención», en tanto que el jefe de gabinete porteño Horacio Rodríguez Larreta dijo que la citación del juez Oyarbide «se está politizando».
Ayer el juez Oyarbide dispuso la citación a indagatoria del jefe de gobierno porteño, del ministro de Seguridad Guillermo Montenegro y del ex ministro de Educación de la ciudad Mariano Narodowsky en la causa de las llamadas «escuchas ilegales» por la que ya están procesados el espía Ciro James y el comisario Jorge Fino Palacios, ex titular de la policía metropolitana.
El ministro del Interior Florencio Randazzo dijo hoy a radio América que «Macri tiene que hacerse cargo de los errores y no desviar la atención» y agregó que las acusaciones del jefe de gobierno de la Ciudad sobre el juez Oyarbide constituyen» «una gran irresponsabilidad».
Conocida la citación a indagatoria para el próximo 28 de este mes, Macri dijo que ese llamado a indagatoria corresponde a supuesta persecución política.
En ese sentido Randazzo subrayó que «Macri tiene que hacerse cargo de que designó a Jorge «Fino» Palacios y, después, a Ciro James y que se dedicaban a hacer escuchas telefónicas, tareas de inteligencia vinculadas a la familia de Macri».
El ministro consideró que «acá hay una intención de querer de querer hacer aparecer al gobierno nacional con algún tipo de responsabilidad en esta cuestión», cuando «es el jefe de Gobierno porteño el que tiene que responder por qué «.
En tanto, desde el gobierno porteño, el jefe de gabinete Horacio Rodríguez Larreta, dijo hoy que la citación que el juez Oyarbide le hizo a Macri «justo coincide cuando está tomando cada vez más fuerza la candidatura presidencial» del jefe de gobierno de la ciudad.
«No nos van a parar», enfatizó hoy el funcionario porteño en declaraciones a radio Diez y aseveró que «no hay absolutamente nada en el expediente que lo pueda relacionar ni cerca a Mauricio con los espías y las escuchas».
Además, el funcionario acusó a Oyarbide de hacer una «telenovela mediática» con el tema, lo cual «es un despropósito», y consideró que «la causa se está politizando».
Por su parte, el juez Oyarbide dijo hoy que «los elementos son muchos» en la causa que investiga por escuchas telefónicas en la ciudad, y sostuvo que no se subirá «a ningún tipo de contestación difamatoria o descalificante» de parte de Macri.
«No me voy a subir a ningún tipo de contestación difamatoria o descalificante, porque tienen un sólo y único propósito, que es provocar mi falta de cordura para arrebatarme la investigación, y eso no va a suceder», dijo Oyarbide en declaraciones en la puerta de su casa.
«Los elementos son muchos, el material es muy abundante.
Estamos hablando de un trabajo muy serio», defendió el juez la investigación que lleva adelante.
«La información debe tener el cuidado y la delicadeza que corresponde a una investigación seria. Todo mi trabajo hasta el presente se ha visto corroborado hasta por Casación Penal», añadió.
También se refirió al tema el jefe de Gabinete del gobierno nacional Aníbal Fernández quien rechazó de plano las acusaciones de Macri acerca de una supuesta persecución política en su contra por haber sido citado.
«El gobierno nacional nunca, jamás, ha ejercido presión sobre un sólo juez» y se preguntó «qué tenemos que ver nosotros (por el Ejecutivo) con lo que está haciendo» la Justicia en relación a la investigación de las escuchas telefónicas ilegales.
Fernández consideró a la acusación de Macri como «una injusticia» y afirmó que «esta gente», por Macri y los demás implicados en la causa que investiga las escuchas ilegales, «tiene un problema severo que lo tienen que resolver».
«¿Qué tenemos que ver nosotros con esto? Esto es un tema que surgió de la pésima forma en que se manejó la fuerza (por la Policía Metropolitana), y de la pésima forma en que se pergeño el esquema de inteligencia y de escucha», planteó el jefe de ministros en la entrevista.
Finalmente la legisladora porteña Gabriela Cerruti reveló que «es la primera vez que un Gobierno vive un escándalo como este de las escuchas, había una asociación ilícita encargada de espiar a legisladores, o miembros de la familia, a cargo del Jefe de Policía. Esto es muy peligroso.» Agregó que «el jefe de Gobierno en vez de poner en marcha la policía Metropolitana lo que hace es exportar una banda de Palacios, que ya había hecho un desastre.»
«A mí Mauricio Macri, cuando lo entrevisté para el libro, me dijo que fue el padre el que pidió las escuchas del marido de su hermana. El tema de escuchas es la manera de manejarse de la familia Macri y lo trasladaron a la Ciudad», reveló Cerruti autora de un libro llamado «El Pibe» sobre Mauricio Macri.