La víctima del intento de robo, un jubilado de 69 años que vive solo en la zona norte de Rosario, quedó en libertad por orden del fiscal al considerar que actuó en legítima defensa.
En medio de la ola de inseguridad que atraviesa la Argentina, por fin podemos reportar un caso donde la persona que pierde la vida no es la víctima si no que el victimario. Este domingo por la noche, un jubilado de 69 años mató de un disparo en el pecho a un ladrón que atrapó entrando a robar a su casa, junto con un cómplice.
El crimen ocurrió en Sorrento y Rondeau, en la zona norte de Rosario, una ciudad que ha sufrido en los últimos años lo peor de la creciente inseguridad debido a la proliferación del narcotráfico, y las desastrosas medidas de Seguridad de los sucesivos gobiernos socialistas y peronistas.
El criminal Nahuel Sebastián Aldana (24 años), se desplomó al salir del domicilio de la víctima, indicaron fuentes policiales a Infobae, y fue luego encontrado cerca de las 23 horas, por la Policía, que se acercó al lugar luego de que vecinos llamaran al 911 por un hombre que yacía en la calle en medio de un charco de sangre.
Cuando llegaron los agentes, junto a una ambulancia del Sistema Integrado de Emergencias Sanitarias, se constató que había muerto por una herida de arma de fuego en el costado izquierdo del tórax.
Mientras se realizaba la preservación de la escena, el autor del disparo, identificado como Jorge C., se acercó a la Policía y contó lo que había sucedido.
El hombre relató que dos delincuentes habían entrado a su casa, que gritó para ahuyentarlos, pero como seguían en su pasillo, tomó su arma y efectuó un disparo, impactándole directamente al pecho.
Todo indica que su cómplice lo abandonó tras recibir el tiro, y lo dejó morir en la calle. El dueño de la casa agregó que desconocía si el tiro había dado en alguno de ellos, debido a que habían escapado corriendo de su propiedad.
El hombre dijo que quería colaborar con las autoridades y entregó su pistola Bersa calibre .22 con numeración visible a la Policía, además de su cargador con nueve municiones y una caja con 88 cartuchos del mismo calibre.
Afortunadamente, tras la declaración del jubilado, el fiscal de Homicidios Dolosos Patricio Saldutti consideró que Jorge C. actuó en legítima defensa, por lo que fue liberado esta mañana y no se le presentarán cargos en su contra.
Al día siguiente, familiares y allegados del delincuente fueron a la casa del jubilado e intentaron agredirlo. “Gritaron, hicieron lío. Yo conozco a algunos. El delincuente era de por acá. Estaba todos los días en la esquina”, dijo a Radio 2 un testigo que prefirió no dar su nombre, quien agregó: “El hombre vive solo, pobre muchacho. Los ladrones estaban adentro de la casa, según me dijo la Policía. Acá siempre andan por los techos, se meten por todos lados”.
En el departamento de Rosario hubo 213 homicidios dolosos en lo que va del año, según el Observatorio de Seguridad Pública. De ese número, 26 fueron cometidos en enero, 32 en febrero, 22 en marzo, 22 en abril, 32 en mayo, 14 en junio, 18 en julio, 24 en agosto, 17 en septiembre y 6 en octubre.