Esta madrugada terminó la urgente reunión convocada en Buenos Aires de la que participaron los presidentes de los países miembros de la Unasur. Y allí formularon una fuerte advertencia contra las intentonas de golpes de Estado, con la aplicación de «medidas concretas e inmediatas», y manifestaron su «pleno y decidido respaldo» al gobierno del presidente de Ecuador, Rafael Correa.
La reunión de «emergencia» que mantuvieron en la sede de la Cancillería argentina, terminó con la decisión de los presidentes sudamericanos de que sus cancilleres viajen a Ecuador para manifestar personalmente el apoyo de la región a Correa, tras el intento de golpe de Estado por parte de fuerzas policiales.
En lo que se denominó la «Declaración de Buenos Aires sobre la situación en Ecuador», los mandatarios se pronunciaron por la inclusión de «una cláusula de democrática» en los reglamentos de la Unasur, en la próxima reunión del bloque que se realizará el 26 de noviembre en Guyana.
El documento conjunto consta de 6 puntos, y señala en el más destacado que las naciones de la Unasur «rechazan enérgicamente y no tolerarán un nuevo desafío al orden institucional ni intento de golpe al poder civil legítimamente elegido». Y advirtieron que «en caso de nuevos quiebres del orden adoptarán medidas concretas e inmediatas tales como cierres de fronteras, suspensión del comercio, del tráfico aéreo y de la provisión de energía y otros suministros».
Los mandatarios decidieron que sus cancilleres se trasladen a la ciudad de Quito para expresar «el pleno respaldo al presidente Rafael Correa y al pueblo ecuatoriano, pertícipe indispensable del restablecimiento de la institucionalidad democrática en ese país».