La justicia confirmó que no hubo un cuatro muerto en el Parque Indomaericano la noche del 10 de diciembre pasado luego de que los presuntos testigos de ese homicidio desmintieran la versión.
No obstante, chofer y médico de la ambulancia confirmaron ante el fiscal Sandro Abraldes que una persona herida que subieron al vehículo fue bajada por la fuerza por un grupo de presuntos vecinos del barrio y golpeado violentamente, aunque no le dispararon como se dijo en principio.
Abraldes, que hoy recusó al juez Eliseo Otero por “prejuzgamiento” en la causa por los homicidios cometidos en el predio entre el 7 y el 10 de diciembre, y además se declaró incompetente, confirmó que sólo hubo tres víctimas fatales.
La versión del cuatro muerto había sido alimentada por declaraciones del titular del SAME, Alberto Crescenti, quien refirió a los primeros dichos de médico y ambulancista, pero fue desmentida un día después por el jefe de gabinete, Anibal Fernández, cuando el cadáver no aparecía en ninguna morgue.
La propia víctima de la brutal agresión, Jhonny Morales, aclaró entonces que sólo fue golpeado cuando quiso defender a su tío, Policarpio Coria, quien sufrió fractura de cráneo en los incidentes.
En sede judicial, el médico declaró que «creyó ver a una persona con un arma corta» y que «se puso a rezar» pero al igual que el chofer descartaron haber escuchado o visto el disparo.