En un reportaje exclusivo con C5N, el diputado nacional consideró que en la causa sobre enriquecimiento ilícito fueron «sometidos a un acto vejatorio».
Además, aclaró que no conoce al juez Norberto Oyarbide. En un repaso por los temas de la agenda pidió «rigurosidad» para reducir la inseguridad y se mostró a favor del matrimonio entre homosexuales.
Sentado en uno de los despachos de la Quinta de Olivos, el ex presidente recibió al periodista Eduardo Feinmann y comenzó adelantando que su primer proyecto en el Congreso será aquel que «modifique la legislación vigente sobre la utilización del helicóptero, el avión presidencial y otras cuestiones que hace a las primeras damas». «Porque yo, como soy el primer damo, no tengo ningún derecho», argumentó.
Consultado sobre las denuncias por enriquecimiento ilícito, el ex presidente dijo que junto con su esposa, la presidente Cristina Kirchner, presentaron «declaraciones juradas sobre patrimonios concretos, reales. El enriquecimiento tiene que ver con bienes ocultos o que no se declaran. Fuimos sometidos a un acto vejatorio. La declaración y los peritajes son perfectos».
Respecto de una supuesta reunión en Olivos con el juez Norberto Oyarbide, quien llevó la causa, Kirchner negó que el magistrado haya estado allí y enfatizó: «No conozco al doctor Oyarbide más que porque lo veo en los medios».
El ex presidente justificó el incremento en su patrimonio en más del 150% con la variación de los valores fiscales de propiedades que «compré en 1978 y vendí recién este año, y los valores son otros».