El diputado porteño Daniel Amoroso, quien impulsó el uso obligatorio de chalecos reflectantes para los motociclistas, afirmó que la ley sancionada por la Legislatura con la intención de frenar los delitos cometidos por «motochorros» se quedó «a mitad de camino» y cuestionó el plazo «experimental» de 180 días que contempla la norma.
Además, el diputado se manifestó a favor de buscar la posibilidad de modificar la ley para ampliar «a toda la Ciudad de Buenos Aires» la prohibición de circular de a dos en moto durante el horario bancario, como forma de combatir los delitos cometidos por los denominados «motochorros».
El legislador cuestionó el artículo que se le agregó a la ley por el cual se dispuso que tendrá vigencia por un plazo de 180 días y luego se evaluarán los resultados para analizar la eventual continuidad o no de las medidas.
«Parte de esos 180 días van a caer en medio del verano, cuando hay mucho menos actividad en general en la Ciudad y no vamos a tener un parámetro adecuado para tomar decisiones. Si realmente queremos combatir el delito, tenemos que trabajar en serio», dijo el legislador, presidente del bloque Unión Federal.
Durante el tratamiento de la ley se sumó al articulado de la norma una propuesta de Amoroso para que tanto el conductor de una moto como el acompañante deban llevar un chaleco reflectante con el número de patente del vehículo impreso y un adhesivo en el casco con el mismo número.